Verduras al paso – Parte II
Descripción de algunas de las “malezas” más comunes
En nuestras ciudades podemos encontrar plantas silvestres comestibles en lotes baldíos, jardines, huertas, caminos y hasta en nuestras propias macetas. Las que siguen son algunas de las más fáciles de encontrar y sus posibles aplicaciones en la cocina:
Diente de León (Taraxacum officinale)
¿Quién no le pidió deseos a los “panaderos”? El diente de león es muy fácil de reconocer, y todas las partes de la planta son comestibles. Las hojas se pueden usar crudas o hervidas y tienen un gusto un poco amargo (por eso también lo llaman “achicoria amarga”). Las raíces se preparan crudas, ralladas en ensaladas, fritas o tostadas y molidas como sustituto del café. Los capullos se pueden comer crudos, cocidos, como encurtidos o fritos; las flores maduras se pueden freír o usar para preparar vinos, cerveza, licores y dulces.
Verdolaga (Portulaca oleracea)
Es una planta muy invasora, por lo que es fácil de encontrar, ¡hasta en nuestras propias macetas!. Es muy rica en minerales y en algunos países se cultiva por su alto contenido en ácidos grasos Omega 3. Sus hojas, que son gruesas y carnosas, se pueden preparar en ensaladas, guisos y sopas; también se pueden preparar en encurtidos.
Mastuerzo (Coronopus didymus)
El mastuerzo se encuentra en veredas, entre las baldosas y en lugares pisoteados porque sus hojas y ramas se apoyan directamente en el suelo. Se consume crudo en ensaladas o como condimento para agregar a mayonesas o aderezos por su sabor picante, parecido al berro. Las hojas secadas al sol se pueden moler para hacer panes, pastas y sopas.
Cerraja (Sonchus Asper)
Suele aparecer en jardines, huertas y en el borde de los caminos. Se encuentra en todo el país y se la considera muy invasora. Se llama así por la forma aserrada de sus hojas, algo parecida al diente de león. Sus tallos y las hojas más tiernas se pueden consumir crudas en ensalada o se pueden cocinar como si fueran espinacas, o agregarse a rellenos y sopas.
Fosforito (Talinum paniculatum)
Es fácil que las flores y frutos del fosforito llamen la atención por su aspecto al costado de caminos, en baldíos, y también sobre escombros y mampostería. Como todo un símbolo de resistencia, es una planta que tolera el glifosato. Las hojas y los tallos tiernos se pueden usar cocidos en todo tipo de rellenos.
Malva (Malva sylvestris)
Es una planta bastante común, que incluso se cultiva como ornamental por el color de sus flores. Las semillas son fáciles de recolectar. Forma parte del botiquín de remedios naturales, pero es menos conocida su aplicación culinaria. Las hojas más tiernas son de sabor suave y se pueden usar en ensaladas en lugar de lechuga o cocinarse al vapor. Las hojas más grandes se cocinan y pueden usarse para enrollar distintas preparaciones, como niños envueltos. Las flores se usan en ensaladas o como guarnición y los frutos se comen crudos.
Manzanilla (Matricaria Recutita)
Otra planta clásica del botiquín de las abuelas, se la encuentra en forma silvestre en el campo y es fácil de reconocer por sus flores perfumadas. Las flores se usan para infusiones, frescas o secadas a la sombra, y para licores. En forma industrial se la destila para obtener aceite esencial.
Capiquí (Stellaria media)
Se la encuentra en jardines, huertas, baldíos y caminos. Toda la planta se puede comer cocida, mezclada con otras verduras. Se puede usar el agua de cocción para cocinar arroz, porque son muy nutritivas y tienen muchos minerales y azúcares, aunque también puede concentrar nitratos. Las hojas, los tallos finos y las flores se pueden usar en ensaladas.
Plantago o llantén (Plantago major)
Aparece entre cultivos, huertas, jardines y en suelos dañados. Es muy conocido por su gran cantidad de aplicaciones medicinales. Las hojas se consumen crudas, cocidas como acelga o en infusiones.
Taco de reina (Tropaeolum majus)
También se la conoce como capuchina, es muy fácil de reconocer en canteros, jardines y huertas; incluso se la usa como ornamental. Las hojas y las flores se pueden usar en ensalada; por sus colores, las flores también se usan como guarnición o para decorar platos. Los capullos se pueden usar en vinagre como las alcaparras, y las semillas se pueden comer tostadas.